Cuando hablamos de innovación, muchos lectores nos cuentan por qué lo relacionamos con estrategia empresarial. En esta entrada vamos a intentar aclarar cuál es la relación entre ambos conceptos, para que se pueda comprender la importancia y las sinergias tan marcadas tan comentada en estos últimos años.
Si hay un concepto utilizado y comentado en distintos medios o fuentes, interlocutores de todo tipo, tanto nacionales como internacionales, es el de innovación. Hay multitud de definiciones, todas válidas focalizando su acción y su interés. Siempre hemos pensado que, a mayor sencillez, mayor claridad, por lo que nuestra idea de innovación supone la realización de cualquier acción que solvente un problema o reto. Si este problema o reto está dentro de una empresa, la innovación tiene un ámbito empresarial.
La consulta que nos hacen de forma habitual es si existen otros tipos de innovaciones. En nuestra opinión y la de otra multitud de autores, la innovación es algo innato a los humanos, porque desde el principio de los tiempos los humanos hemos intentado solventar situaciones que tenían un impacto en su vida. Por este motivo, a la multitud de retos que tenemos como sociedad, la innovación social intenta resolverlos de la forma mejor posible.
innovación empresarial y su relación con la estrategia empresarial
Una vez entendido el concepto de innovación, nos debemos centrar en el concepto de estrategia empresarial. Aquí, como no puede ser de otra forma, no hay una unanimidad sobre cuál es la mejor definición, porque cada autor pone foco y alcance en aquello que conoce mejor. Desde nuestro punto de vista, una buena aproximación sería que, a partir de una situación dada, se trataría del recorrido a realizar para obtener un ventaja frente a la competencia en un mercado dado. Esto supone que se reconoce el terreno y conocer cuáles son los problemas a los que se enfrenta cualquier compañía.
Por este motivo, hay una relación directa entre estrategia de empresa y la innovación. La innovación es la propuesta por la cual superamos los retos de nuestra organización para hacer posible el resto de camino identificado en la estrategia. Por tenerlo claro, la estrategia es el proceso completo de puesta en marcha, mientras la innovación y su propia estrategia es la arma que hace posible superar los retos para hacerse diferencial.
innovación, estrategia y tecnología
Si partimos de la necesidad de saber dónde va nuestra organización (concepto como focalizar el esfuerzo son su mayor exponente), la estrategia no es ni más ni menos que la forma de conseguir superar los distintos retos de la organización para seguir compitiendo en su mercado. A partir de aquí la innovación es la forma de conseguir superar estos retos, permitiéndonos seguir siendo diferentes por solventar sus problemas de la mejor forma posible. Con todo esto, ¿entonces todas las veces que incluimos este término con tecnología? Quizá es porque creemos que viene todo junto, cuando la realidad nos dice otra cosa.
Las tecnologías de la información son un medio por el cual los retos de la empresa son superados. ¿Hay más formas de hacer innovación? Claro que sí. Muchísimas más, porque la idea es, conociendo sus posibilidades, aplicarlas para ver la resolución de estos retos. La tecnología, por sí misma, no resuelve los retos, ya que en el mejor de los casos, automatizará mejores prácticas, sin que se sepa a ciencia cierta si es capaz de adaptar a las personas de la compañía a estas buenas prácticas.
Siempre decimos los tecnólogos algo como que la tecnología es un medio, porque cuando es un fin, el negocio queda a un lado y no mejora. Una buena práctica sería entender el reto de nuestro negocio, intentar pensar cuál sería su mejor solución, probarlo de la forma más barata y rápida posible. A partir de su aceptación, la tecnología resuelve de forma eficaz y eficiente, consiguiendo aplicar toda su automatización en la mejora del negocio.
Como resumen, para aquellos responsables de empresas y negocios, la estrategia de negocio supone cómo vamos a conseguir que nuestra empresa compita en un mercado. La forma de competir es resolver los retos de negocio a los cuales la innovación da respuesta utilizando cualquier recurso. Estos recursos pueden ser desde incorporación de nuevas formas de trabajo, nuevas metodologías o incluso, nuevas tecnologías que, previamente, hayan demostrado su validez.
Por eso, ayer, hoy y siempre, seguiremos manteniendo que la innovación con triple impacto debe hacer mejor la vida a las personas.
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